Artículos Destacados

jueves, enero 07, 2010

Y dicen que el Dakar ya no es lo que era

Así es, lo dice mucha gente. Como la carrera africana, ninguna… Y lo peor de todo es que comentarios de este tipo se sueltan así, con alegría. ¿Qué este Dakar no tiene nada que ver con el de África? Pues que se lo pregunten a Coma, a Viladoms, a Fretigné, a Farrés, a “Chaleco” López, a la veintena de pilotos que se quedaron ayer fuera de carrera en la primera etapa de verdad. Que se lo digan incluso a Casteu, que es segundo no sin sufrimiento. El Dakar, sea donde sea, siempre será el Dakar.

Un comentario fácil y con frecuencia nada reflexivo, sin duda. Nunca he seguido el Dakar en África, y menos aún en Sudamérica, y todas mis referencias son a través de gente que tiene una notable experiencia en esta carrera y en esos parajes. Es cierto que en los territorias africanos del Rally Dakar reside toda la historia épica de la carrera. Sin África el Dakar nunca se habría inventado. Sin la apasionante locura de Thierry Sabine, sin sus sueños, seguramente febriles, cuando hace más de treinta años concibió la idea de esta carrera, perdido en el desierto, sin esa pasión por los territorios abiertos que ofrecía África, nada habría sido igual. Es cierto, pero no debemos quedarnos ensimismados en los viejos (y buenos) tiempos, porque el presente es igualmente bueno. Desgraciadamente, África, de momento, ha quedado atrás; hoy es América. Y el Dakar, en Argentina y Chile, no tiene nada que desmerezca a los territorios africanos.

Etienne Lavigne, máximo responsable de ASO, el organizador del Dakar, dijo en la presentación de la carrera que contemplan el regreso a África cuando la situación política lo permita. La alternancia entre África y América sería una buena solución. Sabemos que África tiene todo lo que necesita la carrera, y el año pasado descubrimos, y hemos ratificado ya en éste, en menos de una semana de carrera, que América ofrece recorridos de una belleza y una dificultad inigualables.

Dicen algunos que el Dakar americano no es tan duro como el africano. ¡Ja! ¿Tú que opinas, Marc...? Hacer cientos de kilómetros, en ocasiones a una altitud en la que una simple caminata ya supone un esfuerzo, en pleno verano -el verano austral de Argentina y Chile, no lo olvidemos-, con un terreno completamente diferente al desierto en el que habitualmente se compite, con una arena muchísimo más blanda, con tacto de harina... El Dakar americano no es mejor ni peor que el africano. Sencillamente, es diferente, e igualmente duro. El resultado que nos ofrece es una carrera apasionante, y eso es lo que nos debe importar por encima de todo.

Lo único que tenemos que lamentar de abandonar África es la situación de desamparo en la que se quedan sus habitantes. Me he hartado de oír absurdas críticas contra esta carrera, una carrera obscena y prepotente, según determinados activistas y gente estrecha de mente que no ve más allá de sus narices. Durante treinta años el Dakar ha puesto en el mapa, aunque sólo fuera durante dos o tres semanas, a una zona del mundo que sobrevive abandonada a su suerte. Esa caravana de ricos, como la llamaban algunos, permitía que decenas de miles de personas vivieran mejor durante alguna temporada, durante unos cuantos días, alguna semana, quizás un mes los más afortunados, porque generaba una riqueza que ahora, en su ausencia, los pueblos perdidos del desierto ya no tienen. Por no hablar de la infinidad de proyectos humanitarios puestos en marcha al calor de la carrera. En la última edición del Dakar africano, había cerca de un centenar de programas de ayudas vinculados a los participantes que se desarrollaron en Mauritania y Senegal, fundamentalmente.

Pero en América no se descuidan las labores humanitarias. También se desarrollan programas de ayuda en parelelo a la carrera, como el plan "Un techo para mi país", que realiza una ONG local en las comarcas andinas, donde se encuentran los más desfavorecidos. Ya me gustaría ver a mí a muchas estrellas de otros deportes apoyando de forma tan decidida actividades de este tipo como lo hacen los pilotos del Dakar que, no lo olvidemos, en un 85 por ciento no dejan de ser meros participantes "amateurs".

Desgraciadamente, el regreso a África no se antoja fácil. La delicada situación política de la zona no favorece el retorno. Hace poco he leído que mientras Argelia, el primer país que tuvo que cerrar sus puertas al Dakar por la amenaza del terrorismo extremista, y en general el Magreb parece más asentado y menos permeable a los extremistas, Al Qaeda ha ganado terreno en el arco subsahariano, y precisamente es Mauritania, un enclave fundamental del Dakar, uno de los países más afectados. Así, el regreso a los viejos territorios no parece sencillo ni muy próximo.

En vez de anclarnos en los viejos (y buenos) tiempos, disfrutemos de todo lo que nos da el Dakar americano. Es tan duro como cualquier edición africana, y los pilotos de hoy, a pesar de los avances técnicos, el GPS y toda la instrumentación que ha hecho de la navegacíón un elemento secundario, son tan buenos como los héroes del pasado. Los míticos Fenouil, Neveu, Auriol, Rahier y compañía eran buenos, realmente buenos, e hicieron grande esta carrera. Pero Coma, Despresa, Casteu... todos ellos son igualmente impresionantes. Como Argentina y Chile. Cada cosa a su tiempo.

Artículo original

3 comentarios:

  1. Anónimo9:33 p.m.

    Lo que sucede es que seguro quieren que hayan muertos como siempre hubo en africa.

    Nada mejor que en America, sin tanto riesgo de tribus nomades salvajes, ni guerras.

    ResponderBorrar
  2. Anónimo9:34 p.m.

    Pero el peligro y dificultad siempre estan, la emocion no puede faltar, me hace recordar a la vieja carrera Caminos del INCA en el Peru.

    ResponderBorrar
  3. Anonymous said...
    Lo que sucede es que seguro quieren que hayan muertos como siempre hubo en africa.

    Nada mejor que en America, sin tanto riesgo de tribus nomades salvajes, ni guerras.

    9:33 PM

    .--------------------------------------------------


    el año pasado murio un personaje tambien.. lo recuerdo...


    yo creo que es más una cosa nostálgica... además de que haya es más exotico que acá...es más salvaje... y tu sabes que a los europeos y gringos les encantan las cosas salvajes y mal hechas... que los desordenen

    ResponderBorrar

ACLARACION: Este blog no es antiperuano ni nacionalista chileno. Este blog simplemente recopila y (a veces) comenta sobre artículos recopilados en la prensa nacional y mundial y que involucran a Chile. Si parece "cargado" hacia Perú, simplemente, es resultado de la publicación constante -y obsesiva- en ese país de artículos en que se relaciona a Chile. Así también, como ejemplo opuesto, no aparecen articulos argentinos, simplemente, porque en ese país no se publican notas frecuentes respecto Chile. Este blog también publica -de vez en cuando- artículos (peruanos o de medios internacionales) para desmitificar ciertas creencias peruanas -promovidas por medios de comunicación y políticos populistas de ese país- sobre que Perú ha superado el desarrollo chileno, lo que es usado en ese país para asegurar que Chile envidia a Perú y que por eso buscaría perjudicarlo. Es decir, se usa el mito de la superación peruana y la envidia, para incitar el odio antichileno en Perú.